¿Qué es?
El flato, o Dolor abdominal transitorio relacionado con el ejercicio (ETAP), es una molestia muy conocida entre diversas prácticas deportivas, lo que no es de extrañar debido a la gran cantidad de personas que ha sufrido alguna vez de esta dolencia. Se estima que aproximadamente el 70% de los corredores ha experimentado el flato durante el último año, y que en una carrera, se puede esperar que aproximadamente 1 de cada 5 corredores lo sufra.
En un estudio de Morton and Callister, se realizó una encuesta a 965 deportistas sobre cuántos de ellos habían experimentado el flato en el último año. Los resultados fueron: El 75% de los nadadores, 69% de los corredores, el 62% de los jinetes de caballo, el 47% de los jugadores de baloncesto y el 32% de los ciclistas.
¿Cómo es este dolor?
Durante las observaciones, cuando el dolor se presentaba con severidad, la sensación era de dolor agudo o punzante, mientras que cuando el dolor aparecía con menor intensidad, se parecía más a un calambre muscular, a una molestia o a una sensación de tirantez.
Este dolor, aunque sea en su mayoría benigno, puede con bastante facilidad comprometer los resultados y la participación de los individuos durante su práctica deportiva.
En cuanto a la localización del dolor: (Algunos pacientes representaron en dolor en varios sitios).
Algunos pacientes también refirieron dolor en el techo del hombro (Área de dolor referido del nervio frénico, relacionado con el diafragma y estructuras colindantes).
¿Quiénes tienen más probabilidades de sufrir esta dolencia?
En principio puede padecerlo cualquier persona que realice actividades que involucren movimientos repetitivos del tronco en una postura de extensión (con el tronco erguido) , como pueden ser los deportes antes mencionados (carrera, natación, ciclismo, etc.).
Pero se ha visto mayor prevalencia en:
Las personas que han ingerido alimentos antes de la actividad, siendo especialmente provocativas las bebidas hipertónicas.
La gente joven.
Las personas que tienen mayor grado de cifosis. (Columna encorvada, enchepada).
Las personas que poseen un músculo transverso del abdomen más fino y con peor calidad de contracción. El músculo transverso es el más profundo de los músculos del abdomen. Este músculo comprime el abdomen hacia dentro y colabora con la estabilidad lumbar.
Las personas no entrenadas. Los atletas entrenados también pueden sufrir de esta condición, aunque si que es cierto que con menos frecuencia.
NO parece guardar relación con:
El sexo al que pertenezcas.
índice de masa corporal (Peso en relación a la altura).
Anecdóticamente también se ha relacionado el flato con un calentamiento inadecuado o con condiciones ambientales frías, pero por ahora los resultados se consideran inconcluyentes y se requiere más investigación al respecto.
Etiología ( ¿Cuál es la causa?)
Aunque se han hecho muchos progresos en los últimos 15 años, la etiología del flato sigue siendo especulativa. Mientras que algunas teorías han perdido peso con los recientes descubrimientos, otras nuevas han aparecido.
En el mencionado artículo de Morton and Callister se sugirió que el flato podría estar causado por la irritación del peritoneo parietal.
¿Qué es el peritoneo parietal?
El peritoneo es la membrana que cubre la mayor parte de los órganos del abdomen. (En amarillo)
El peritoneo parietal, que es la capa exterior de esta membrana, se adheriere a la pared abdominal relacionándose con el diafragma por arriba y con la pelvis por abajo.
Esta teoría parece encajar en muchos aspectos:
Cuando este tejido refiere dolor, es muy parecido al del flato.
La parte que cubre el diafragma esta inervada por el nervio frénico, y su irritación produce dolor en el techo del hombro.
El dolor se acentúa con el movimiento, en posición erguida y el dolor desaparece rápidamente al eliminar el estímulo.
La ingesta de alimento distiende el estómago, provocando un mayor acercamiento de las vísceras a la pared abdominal, lo que aumenta la fricción en la zona.
Durante el ejercicio-> menos líquido, más fricción. Entre las vísceras y la pared abdominal hay un flujo constante de líquido. Este líquido disminuye durante el ejercicio, dado que durante este, el aporte sanguíneo disminuye, y el bombeo del diafragma facilita su drenaje hacia el sistema linfático. Además, este fluido, responde con facilidad a los gradientes de presión osmóticos entre este líquido y el aporte venoso, lo cual podría explicar el efecto provocativo de las bebidas hipertónicas.
Una mayor funcionalidad del músculo transverso del abdomen y los demás estabilizadores puede reducir la movilidad del contenido abdominal, reduciendo la fricción y así disminuyendo los síntomas.
Aunque solo sea una especulación, muchas características del flato parecen encajar en esta teoría, así que la fricción del peritoneo parietal puede ser una posible explicación del flato.
Otras teorías:
Isquemia diafragmática (falta de aporte sanguíneo en el diafragma): Parece una etiología improbable dado que una isquemia en este músculo reduciría la funcional del mismo y la inhalación se vería comprometida.
Stress mecánico de los ligamentos viscerales: Esta teoría explica gran parte de lo que ocurre durante un episodio de flato, pero tiene deficiencias, dado que el flato puede aparecer en deportes como la natación, donde no hay movimientos de sacudida. Tampoco consigue explicar la localización y las características de dolor.
Alteraciones gastrointestinales: Aunque el flato se considera con frecuencia un problema gastrointestinal, el dolor no se puede relacionar consistentemente con un origen del mismo.
Calambre muscular: Fue desacreditada dado que durante un episodio de flato no se encontraron cambios en la actividad electromiográfica del músculo.
Dolor neurogénico (proveniente de una compresión nerviosa): En ciertas patologías de este tejido se presenta un dolor muy parecido al del flato. Además, movimientos repetitivos de tronco como como los que ocurren en la carrera, podrían resultar en una reducción de la altura de los discos vertebrales , lo que haría los nervios más vulnerables a la compresión. Por otro lado, esta teoría no explicaría otros síntomas asociados, como la relación entre el dolor y la ingesta de comida.
Síndrome del ligamento arcuato medio: Dada su gran prevalencia y su posición se cree que pueda guardar relación, pero seguiría sin explicar varias características del flato.
Manejo del flato:
Dado que la etiología del dolor no se ha entendido por completo, la mayoría de las estrategias para evitarlo son anecdóticas.
Evitar grandes ingestas de comida y bebida 2 horas antes de realizar ejercicio. Incluso 3-4 horas para aquellos mas vulnerables. También se deberán evitar las bebidas hipertónicas. Durante el ejercicio, se recomiendan ingestas pequeñas pero regulares de líquido.
Las técnicas para ayudar o restringir el movimiento en el tronco pueden ser de ayuda (cinturón de apoyo en la cintura), pero sería más aconsejable mejorar la estabilidad del tronco (core) y la postura.
Ocurre con menor frecuencia en las personas con buen estado físico, por lo que seguir haciendo ejercicio para intentar mejorarlo puede ser de ayuda.
Por último, el estudio McCrory sugirió cómicamente: Si todo lo demás falla, hazte mayor, dado que el flato es menos frecuente con la edad.
Espero que os sea de ayuda!.
Carlos López.
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